domingo, 31 de agosto de 2014

Cruzando el paraiso

Antes de empezar a leer la entrada, recomiendo hacer click en este enlace:

https://www.youtube.com/watch?v=EE9a4paOHPc

Me encantaría prometer que las noches de salir a machacar nunca se van a acabar. Que seguiremos quedando para ver los partidos de baloncesto de España o para celebrar el día de gordos en navidades. Y también en agosto. Que los miércoles se come en veterinaria. Me encantaría jurar que seguiremos haciendo fiestas en mi casa cada verano por fin de exámenes y que me pondré de mala ostia cada vez que estando borracho reciba una colleja. Que nos quedan miles de conciertos en los que cogernos de los brazos, saltar y gritar juntos, que seguiremos sintiendo la sensación de estar solos cuando nos encontramos en medio de toda la gente en un reencuentro, tras llevar unos cuantos meses sin vernos. Que llevaremos a cabo un proyecto de ley por el cual se prohiba a nadie ausentarse en las cervezas después de los partidos. Que cuando cada vez que vayamos al cine y me indigne por el precio de la entrada, acabaré maravillado por la peli, que practicaremos la canción de feo fuerte y formal hasta que nos la sepamos bien con la guitarra, que algún día acabaremos dando un concierto todos juntos. Que las noches de verano siempre se acabarán cuando la gente salga de casa para ir a trabajar, y siempre saldremos a correr por la playa antes de ir a dormir. Que después de una gran borrachera y una tremenda resaca, el día posterior nos lo pasaremos viendo pelis, jugando a la playa y lo llamaremos "día de solteros". Que nos quedan muchas noches escuchando a Bob Marley, a Tool y a los padres del Blues en el coche, después hacer la patrulla con el volumen a tope mientras suena la intro de Los Soprano. Que la policía seguirá cortándonos el rollo a las 3 de la mañana mientras vemos las estrellas en las cañadas. Que seguiremos gritando que no necesitamos ninguna excusa para salir un viernes a cantar por Madrid, o para visitar cualquier lugar del mundo dando lo mejor de nosotros. Que nos aprenderemos todas las canciones de Loquillo y un día gritaremos todos juntos Cuando fuimos los mejores hasta quedarnos sin voz. Que por un colega se viaja a Irlanda, se va al Vellón, a un garito lleno de paraguayos a bailar bachata, a una graduación de medicina o a un mitin de UPYD.


No prometo que siempre será así, pero prometo que cada vez que nos encontremos seguiré viéndoos con los mismos ojos. Gracias amigos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario